30 notas sobre el talento

27 junio 2019

Hace años que doy vueltas a eso que llamamos talento en el mundo profesional. Las organizaciones necesitan gente capacitada para moverse en entornos dónde construir una estrategia no es fácil, pero ofrecer resultados positivos y sostenibles es realmente difícil. Cuando se habla de talento, como en todo, se puede exagerar bastante. Y de hecho hemos vulgarizado el uso de la palabra talento. Pero no hay duda de que no es lo mismo quién (y subrayo ese quién) hace las cosas en las organizaciones. El talento acostumbra a ser diferencial.

A lo largo de todos los años de mi vida profesional he podido admirar a mucha gente. La mayoría se hubieran sentido incómodos si les hubiéramos etiquetado de talentosos. Simplemente se consideraban buenos profesionales. Gente que lo da todo y que es capaz. Profesionales consistentes. La mediocridad nos aleja del talento. La consistencia nos refiere al talento.

Cuando leo que algunas empresas empiezan a introducir en los contratos laborales una parte de “learning contract”, para enfatizar la importancia y la responsabilidad sobre la propia adaptación, constato que adaptarnos a los cambios importantes cada vez más será un indicador de talento.

Necesitamos empresas que pongan las bases para crear comunidades profesionales sólidas. No hacen falta muchos juegos artificiales. Básicamente, que las personas se respeten y puedan crecer. Que no existan tantos techos de cristal. Que no esté bien visto taponar a los que razonablemente piden paso desde un talento constatado. Que se crezca gracias a espirales de inspiración compartida. Y que las oportunidades se vinculen al talento. Nada más. Y nada menos.

Escribo estas notas numeradas para ordenar ideas respecto del talento y compartirlas.

1.- A veces generalizamos el término talento para referirnos a todas las personas que trabajan en una organización. Practicamos una generosidad equivocada.

2.- Hay diversos tipos de talento, igual que hay diversos tipos de inteligencia. Pero no hay talento sin resultados.

3.- Las personas de talento no son expendedores de excusas, prefieren ofrecer resultados, habitualmente los ofrecen por encima de la media. Los objetivos importan.

4.- El talento dibuja una constante, no es un episodio, no son cantantes de una sola canción. Uno no tiene talento de por vida. Hay que estar al día, asumir nuevos desafíos y dar resultados. El mejor talento es el que vive con la humildad de aprender siempre.

5.- El talento no es solamente conocimiento. En la escuela nos evaluaban ya hace muchos años por conocimientos, procedimientos y actitud. No estaba tan mal visto.

6. El talento dibuja trayectorias dónde reconocerse. No importa que sean sinuosas, importa su sentido. El binomio propósito consistente y talento es ganador.

7. Tener o crear oportunidades, dentro o fuera de una organización es un indicador de talento. A una persona de talento, cada dos o tres años, les acontecen puntos y a parte en su vida profesional. Oportunidades no inerciales. Si a uno, cada dos o tres años, solamente le vienen puntos seguidos o no sucede nada relevante en su carrera profesional, quizás uno cree que tiene mucho talento, pero los demás no se dan cuenta.

8. No hay talento sin capacidad de adaptación. Al contrario, el no-talento está muy vinculado a la capacidad de adaptación.

9. El talento no se construye acumulando muchos títulos de formación. Ir a clase o formarse es una cosa y aprender es otra cosa. El talento se forja aprendiendo y desaprendiendo.

10. Las organizaciones gestionan mejor el talento que el no-talento. No hay gestión del talento sin gestión del no-talento. La incompetencia existe y hay que afrontarla.

11.- En general, quien tiene talento no tiene tiempo, y si lo tiene, lo utiliza para pensar y escribir (si no escribimos no sabemos si pensamos).

12.- Es un error dejar la innovación a los que tienen tiempo.

13.- Los tóxicos (aquellos que Einstein definía como esa gente que encuentra un problema para cada solución) son consumidores extremos de tiempo de su entorno. A más toxicidad, más tiempo reclaman. Dedicarles mucho tiempo es un gran error. Lo suyo no se soluciona con darles mucho más tiempo que a los comprometidos y a los generosos. Un talentoso tóxico podría ser letal.

14.-Al talento no hay que motivarlo, lo que hay que hacer es no desmotivarlo.

15.- Talento atrae talento y mediocridad atrae mediocridad.

16.- Lo peor que le puede pasar a una organización es que los mediocres se hagan con el sistema de contratación.

17.- Nunca deberíamos contratar a nadie que, en algo, no sea mejor que aquellos con los que debe interactuar.

18.- Hay cuatro preguntas importantes al hacer las cosas: a) su ¿porqué?, b) en qué consisten, c) cómo se hacen (know how) y d) quién las hace (know – who). La última pregunta es la más olvidada en el sector público. Es un gran error.

19.- La estrategia son personas. Quién hace las cosas es diferencial. Las empresas necesitan tener talento de guardia.

20.- La empresa ideal es la que incorpora un número suficiente de talento y buenas personas. Los que tienen talento nos hace competitivos. Las buenas personas ayudan a construir comunidades que valen la pena.

21.- En los próximos años el gran reto de los profesionales es combinar la inteligencia artificial con la inteligencia natural de las personas. Y es en esa nueva relación entre personas y máquinas dónde debemos decantar la ecuación hacia el talento de las personas. Las máquinas inteligentes no tienen talento, tienen algoritmos.

22.- Las organizaciones en las que no entra ni sale casi nadie deben ser las más preocupadas por el talento. Un flujo razonable es un síntoma de talento, con pocas excepciones.

23.- En el cómo gestionamos el talento hay una huella profunda de la cultura corporativa de una organización.

24.- Las organizaciones necesitan talentos complementarios. Las organizaciones abiertas complementan mejor el talento interno con el talento externo, o combinan atinadamente talento experto con talento innovador.

25.- En las reuniones, los destellos de talento son armas de construcción masiva. El talento de ego contenido se expresa con la contundencia que le da la brevedad.

26.- Es raro el talento sin esfuerzo.

27.- El talento acostumbra a ser autoexigente.

28.- Es muy deseable que el talento milite más en las soluciones que en los problemas.

29.- Cuando las personas de talento dudan lúcidamente me inspiran más confianza.

30.- En la era de la gestión de la complejidad, la persona de talento sabe construir síntesis sobre un número de matices exponencial.

30 + 1 . Conjugar talento con humildad abre las puertas de la sabiduría.

No dejes de leer Esquivar la Mediocridad.

Artículo escrito por Xavier Marcet

Fundador y presidente de Barcelona Drucker Society

10 Comentarios

  1. Raquel

    Simplemente precioso, real e inspirador

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  2. Rosendo Hernández

    Es difícil quedarse con una sola nota y más cuando la mayoría expresan tan magistralmente ideas que llevo defendiendo hace años. Me siento bastante reflejado en esas notas, lo que no significa que me considere una persona de talento (eso o se me da muy bien conjugarlo con la humildad ?). Lo que cuenta Marcet nunca podré verlo como mera palabrería porque lo he vivido. Como ejemplo, eso de «si no escribimos no sabemos si pensamos», que me recuerda el gran impulso que significó para mi carrera casi 4 años de blog. En resumen, muy inspirador.

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  3. David Barreda

    GRACIAS por este regalo en forma de post… gracias!

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  4. Arantxa Toledo

    Excelente síntesis de lo que el talento representa en una organización. Cuando leí el título me parecieron demasiados puntos ¡30! ¿Tanto hay que decir sin repetirse? Sin embargo me quito el sombrero. Todos y cada uno inician la reflexión sobre cómo estamos gestionando el talento en nuestros equipos. Enhorabuena y gracias!

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  5. Sandry

    En resumen la importancia de adquirir y fortalecer los dones.

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  6. Abraham

    BUF!!!
    Yo me quedaría en el primer punto y desarrollaría una estrategia para dejar de ser políticamente correctos. Que todo el mundo asumiera su rol, su papel, su realidad…
    Gracias a que todos somos talentosos, que todos podemos estudiar talento y que todos podemos realmente sorprender a todos (sin ningún criterio riguroso y fiel) con el desarrollo de nuestras capacidades adquiridas, o por lo menos eso nos han dicho en donde hemos estado matriculados, gracias a todo eso… todos somos mas mediocres.
    Salvando las distancias de la cita, «¿quien quita la música en la fiesta de los mediocres?».
    Entre tanto, los talentosos hemos sido los «borrachos» expulsados de nuestra propia juerga de evolución, creatividad, constancia y trabajo, menos estudios y mas trabajo.
    Se que no es una nota simpática, tampoco lo han sido los mediocres dominantes de una situación postmodernista y decadente que lo único que busca es la aprovación de la turba con movil y mando a distancia.
    Y tampoco voy a dar las gracias al autor de este post, nota o como dentro de una semana pase a denominarse este tipo de publicaciones digitales. Me parecen unas lineas cargadas de autoayuda y psicología de bolsillo, apuntadas por alguien que en su día mando expulsar a mas de un talentoso. No digo que no lo sea, pero, por que no escribe «Como detectar al mediocre y neutralizarlo laboralmente»?
    Antes de empezar con esta disertación, piense que puede dejar sin masa laboral al país y por eso le voy a sugerir otro título «Como detectar al mediocre y neutralizarlo personalmente» o pensándolo mejor, no haga nada, se encontraría en medio de un marasmo tormentoso de miserables.
    Sin mas y esperando no herir sensibilidades, les deseo lo mejor.
    Un saludo.

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  7. María Rosell

    Brillante, gracias Xavier, has dotado de nuevo el concepto de consistencia y realidad.

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  8. Ramiro Fernández

    Esclarecedor, iluminador, la realidad verdadera, el mètodo Galileico aplicado al sentido comün. Cuando me preguntaban por qué me había separado de mi mujer (hace 15 años) siempre contestaba lo mismo : «para cada solución tiene un problema»; al leerlo en boca del MAS GRANDE he empezado a llorar desde lo más profundo de mi alma de la absoluta plenitud que me ha invadido… AMO A ESTE SEÑOR

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  9. Magda Vila

    Gràcies Xavier. Uns punts clau per a la direcció de persones i desenvolupament d’equips.

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  10. José Luis Jiménez

    Cuando las personas de talento dudan lúcidamente me inspiran más confianza. Me parece brutal esta frase unida a que aprender y desaprender van de la mano.
    A veces nos dejamos llevar por quienes no dejan ver sus dudas razonables y las buenas ideas precisan de trabajo, adaptación y acciones para que se materialicen y den sus frutos. Por eso estas frases me encantan y llevan a la reflexión.
    Un saludo.

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